Pues como que sí anda en otro lugar, pero no creo que sea un lugar tan feo. Siempre carga sus poemas, los vende a veces caros, pero todo lo que escribe vale la pena.
Huí de falacias acreditadas,
me despojé de su facilidad y sus cristales,
y de pronto en la gruta de Platón vi mi silueta
terriblemente deformada.
Fragmento de “Caricatura de la verdad”